El Core Curriculum es un conjunto de ocho asignaturas que todos los alumnos de pregrado deben realizar, independiente de la carrera que hayan elegido. De esta manera, gracias al Core todos los estudiantes de la UAI desarrollan una experiencia de aprendizaje común, centrada en un ejercicio sistemático de discusión y reflexión en torno a las expresiones filosóficas, artísticas y científicas más relevantes de la historia de Occidente.
Las asignaturas que conforman el Core son:
Desde diversos ángulos, estos cursos impulsan a los alumnos a participar activamente en discusiones sobre aspectos centrales de la experiencia humana y de la vida en sociedad: El libre albedrío, la justicia, el bien humano, la naturaleza de la verdad, la tensión entre el orden colectivo y las pasiones individuales, por nombrar algunos.
En el Core Curriculum se nos plantean las grandes preguntas de la humanidad, y se discute cómo han abordado estos mismos temas distintos autores durante 2500 años, que aún se conservan vigentes. Probablemente ninguno dará la solución, pero harán que los estudiantes encuentren sus propias respuestas”.
La metodología basada en preguntas y en la participación activa de los estudiantes, junto con el formato de las clases, dirigidas a un máximo de 23 alumnos dispuestos en torno a una mesa, constituyen uno de los sellos distintivos de las asignaturas Core y facilitan el logro de su principal objetivo: estimular el pensamiento, la capacidad reflexiva y la autonomía intelectual de los estudiantes.
Para implementar los cursos Core, la UAI ha establecido un convenio de apoyo académico con la prestigiosa Universidad de Columbia, institución que tiene una experiencia ininterrumpida de casi 100 años en su aplicación.
Para dejar libre juego a la naturaleza de cada uno es esencial que personas diferentes puedan seguir diferentes vidas. Todo lo que aniquila la individualidad es despotismo.
Durante demasiado tiempo el hombre ha contemplado con malos ojos sus inclinaciones naturales, de modo que estas han acabado por hermanarse en él con la “mala conciencia”. ¿Sería posible un intento en sentido contrario, a saber, el intento de hermanar con la mala conciencia las inclinaciones innaturales, todas esas aspiraciones hacia el más allá, hacia lo contrario de los sentidos, lo contrario a los instintos, lo contrario a la naturaleza?